Mujer fingió su secuestro y gastó el dinero de la recompensa en un bingo
- Por: Francisca Oliva
Una mujer española engañó a su esposo haciéndose pasar por sus presuntos secuestradores, exigiendo un monto mayor a 5 millones de pesos chilenos.
Hace un mes, el 4 de octubre, una mujer de Barcelona alertó a su esposo de haber sido secuestrada. A través de un mensaje de celular, le escribió que la habían raptado y que sus secuestradores estaban exigiendo 6.000 euros -cerca de 5 millones y medio de pesos chilenos- para liberarla.
Ante esto, el hombre acudió de inmediato a la policía y notificó el presunto crimen a los funcionarios, quienes iniciaron su búsqueda inmediatamente. Sin embargo, la historia dio un giro algo inesperado.
Encontraron a la mujer jugando una partida de bingo sin rasguños, sana y salva. Al dar con su paradero, se dieron cuenta que gastó el dinero del supuesto rescate.
Mujer es descubierta
Las cámaras de seguridad del lugar revelaron la mentira de la mujer, pues engañó a su esposo para obtener el dinero y poder ir a jugar a una sala de bingo.
Investigadores de la División de Investigación Criminal (DIC) detuvieron a la mujer por “fingir ser privada de su libertad y afirmar que sus captores exigían 6.000 euros para ser liberada con vida”, y pese a que fue liberada bajo fianza, deberá comparecer en el juzgado de Barcelona.
No es primera vez
Anteriormente, una historia similar ocurrió en Perú, donde una mujer grabó un video simulando estar secuestrada además de fingir un embarazo.
Anali Luna Tavera (37) relató a la policía que el día 19 de octubre fue secuestrada por tres individuos durante su trayecto a un recinto hospitalario para someterse a una supuesta cirugía, pero el testimonio de la mujer no concordaba con los registros de las cámaras de seguridad del lugar, las que indican que siempre estuvo sola y que nunca fue abducida por estos sujetos.
“Vamos a hablar algo claro. Yo tengo a la mujer y a tu hija y si quieres volver a verlas necesito que me des doscientos mil soles”, le dijo el criminal al esposo de la supuesta víctima tras enviarle una foto de Anali amarrada, de acuerdo al medio peruano Peru21.
La mujer apareció a los tres días de iniciada la investigación e inventó que los delincuentes le habían inducido el parto para robarle a su bebé.
Para corroborar las palabras de Anali, la policía se dirigió a la clínica donde se hacía sus supuestos chequeos de embarazo. El plan de la mujer se cayó cuando el personal del recinto le informó a las autoridades policiales que ella no podía quedar embarazada, tras someterse a un método anticonceptivo quirúrgico, consignó T13.